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Influencia del tejido adiposo en la programacion metabolica temprana

El artículo Influence of Adipose Tissue on Early Metabolic Programming: Conditioning Factors and Early Screening es una revisión bibliográfica que analiza el papel del tejido adiposo en la programación metabólica temprana y los factores que pueden condicionarla, así como las posibles estrategias de prevención y detección precoz de las alteraciones asociadas. La programación metabólica temprana se refiere al proceso por el cual el ambiente intrauterino y postnatal influye en el desarrollo y la salud del individuo a lo largo de su vida, determinando su susceptibilidad a padecer enfermedades no transmisibles como la obesidad, la diabetes, la hipertensión o el síndrome metabólico¹.


Los autores revisaron la evidencia científica disponible en las bases de datos PubMed/MEDLINE y Web of Science sobre el tejido adiposo y su influencia en la programación metabólica temprana. Algunos de los hallazgos más relevantes que reportaron fueron los siguientes¹:


- El tejido adiposo es un órgano endocrino que participa en la regulación del metabolismo, la inflamación, la inmunidad y la homeostasis energética. Su desarrollo se inicia en el periodo fetal y continúa durante la infancia y la adolescencia, siendo sensible a los cambios ambientales y nutricionales.

- El tejido adiposo puede programarse por diversos factores que afectan al ambiente intrauterino y postnatal, como el estado nutricional, hormonal y metabólico de la madre, el peso al nacer, el crecimiento postnatal, la lactancia materna, la microbiota intestinal o los contaminantes ambientales, entre otros.

- El tejido adiposo programado puede alterar la función y el número de los adipocitos, así como su distribución regional, lo que puede conducir a una mayor acumulación de grasa visceral, una menor sensibilidad a la insulina, una mayor secreción de citoquinas proinflamatorias y una menor producción de adiponectina y leptina, hormonas implicadas en el control del apetito y el gasto energético.

- El tejido adiposo programado puede contribuir al desarrollo de resistencia a la insulina, dislipidemia, hipertensión, inflamación crónica y estrés oxidativo, lo que aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y metabólicas en la edad adulta.


Los autores también ofrecieron algunas recomendaciones prácticas para prevenir y detectar precozmente las alteraciones del tejido adiposo asociadas a la programación metabólica temprana, basadas en las directrices de la OMS y otras organizaciones¹. Algunas de estas recomendaciones son las siguientes:


- Promover una alimentación equilibrada y variada antes y durante el embarazo, evitando las deficiencias o los excesos nutricionales que puedan afectar al desarrollo fetal.

- Controlar el peso gestacional y evitar el tabaquismo, el alcohol y otras sustancias tóxicas durante el embarazo.

- Fomentar la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida y complementaria hasta los dos años o más.

- Estimular la actividad física regular desde la infancia hasta la edad adulta, adaptada a las características y preferencias individuales.

- Realizar un seguimiento del crecimiento infantil mediante indicadores antropométricos como el peso, la talla, el perímetro cefálico y el índice de masa corporal.

- Evaluar periódicamente los parámetros bioquímicos relacionados con el metabolismo lipídico y glucídico, así como los marcadores inflamatorios y oxidativos.

- Utilizar técnicas de imagen como la ecografía o la resonancia magnética para medir el espesor del pliegue cutáneo subescapular o el área grasa visceral.


El artículo concluye que el tejido adiposo juega un papel clave en la programación metabólica temprana y que su prevención y detección precoz pueden mejorar la salud y reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles en la edad adulta.